¿Cómo purgar un termotanque?

Los termotanques son fundamentales para nuestro confort en el hogar: proveen el agua caliente para duchas, limpieza y uso diario. Pero con el tiempo, los sedimentos minerales se acumulan en su fondo, reduciendo su rendimiento, aumentando el consumo y acortando su vida útil. Por eso es clave saber cómo purgar un termotanque correctamente.

Aquí te muestro paso a paso el procedimiento, cuándo hacerlo, señales de advertencia y consejos extra para que tu equipo funcione como el primer día.

¿Por qué es importante purgar un termotanque?

  • Con el tiempo, los sedimentos —arena, cal, minerales— se depositan en el fondo del tanque, generando una capa aislante que obliga a la resistencia o al quemador a trabajar más intensamente.
  • Esa carga extra se traduce en mayor consumo de energía y facturas más altas.
  • Además, los sedimentos pueden provocar ruidos (burbujeos, golpes), corrosión interna y averías prematuras.
  • Purgar el termotanque permite eliminar impurezas, liberar aire acumulado y mantener la eficiencia del equipo.

Estos puntos aparecen repetidos en guías especializadas sobre purga de termotanques.


¿Cuándo purgar el termotanque?

La frecuencia depende de varios factores: la calidad del agua (si es dura o blanda), el uso diario y el tipo de termotanque (eléctrico, a gas, dual).

Tipo / condiciónFrecuencia recomendada*
Zonas donde el agua tiene muchos mineralesCada 3–4 meses
Termotanques eléctricosCada 4–6 meses
Termotanques a gas de buena calidadCada 6–12 meses
Si observás señales (ruidos, demora en calentar)Inmediatamente

* Algunos fabricantes y sitios técnicos recomiendan drenar unos 20 litros por mes del grifo de purga como mantenimiento preventivo.

Señales de que tu termotanque necesita purga urgente

  • El agua caliente demora mucho en llegar
  • Cambios bruscos de temperatura en la ducha
  • Agua turbia o con partículas al abrir las canillas
  • Ruidos extraños como burbujeo, golpes o chasquidos
  • Aumento inesperado en la factura energética
  • Reducción de presión del agua caliente

Estas señales coinciden con las presentadas en artículos técnicos del sector.


Herramientas y medidas de seguridad

Antes de empezar, reuní lo siguiente:

  • Manguera resistente al calor (compatible con la válvula de drenaje)
  • Cubo o recipiente grande
  • Trapo o balde para recoger escapes
  • Llave de tubo o llave ajustable
  • Destornillador plano (opcional, para válvulas difíciles)

Y en cuanto a la seguridad:

  1. Cortá la energía eléctrica desde el tablero (o cerrá suministro de gas).
  2. Asegurate de que el tanque no esté presurizado.
  3. Esperá que el agua dentro del tanque pierda temperatura para evitar quemaduras.
  4. Si manejás gas, trabajá con buena ventilación y apagá la piloto antes de manipular.
  5. Si no te sentís seguro, mejor llamá a un gasista matriculado.

Pasos para purgar un termotanque

Paso 1: Apagar la energía o el gas

  • Para termotanques eléctricos: cortá el disyuntor o interruptor asociado.
  • Para los de gas: poné la perilla en “Piloto” o “Off” y cerrá la válvula de gas.

Paso 2: Cerrar la entrada de agua fría

Buscá la llave de ingreso de agua fría al tanque (generalmente arriba). Girala hasta cerrarla por completo. Esto evita que nueva agua fría entre mientras hacés la purga.

Paso 3: Abrir un grifo de agua caliente dentro de la casa

Abrí una canilla de agua caliente para “desahogar” el sistema y que el aire y agua puedan salir sin obstrucciones.

Paso 4: Conectar y abrir la válvula de purga

  • Localizá la válvula de drenaje en la base del tanque.
  • Conectá la manguera resistente al calor y direccionala hacia un desagüe.
  • Abrí lentamente la válvula (girando en sentido contrario a las agujas del reloj) hasta que empiece el flujo de agua.

Paso 5: Drenar el tanque

Dejá que el agua corra unos 15 a 20 minutos o hasta que salga clara. Al principio puede salir con sedimentos o estar turbia; eso es normal. Siguiendo guías técnicas, se sugiere mantener el drenaje hasta que el agua esté limpia.

Si tras ese tiempo el agua sigue muy turbia, cerrá la válvula, esperá unos días y repetí la operación.

Paso 6: Cerrar la válvula de purga

Una vez que el agua sale limpia, cerrá bien la válvula (girando en sentido horario). Asegurate de que no queden fugas.

Paso 7: Volver a llenar el tanque

  • Abrí la llave de entrada de agua fría al tanque.
  • Mantené abierta la canilla de agua caliente hasta que el flujo sea continuo y sin burbujas — eso indica que el tanque ya está lleno.
  • Cerrá la canilla.
  • Volvé a restablecer la energía eléctrica o el gas. Esperá que el termotanque caliente el agua antes de usar.

Consejos extra y mantenimiento preventivo

  • Ajustá la temperatura del termotanque entre 50 °C y 60 °C: no hace falta ir más alto y evitás mayor desgaste térmico.
  • Colocá aislamiento térmico (manta aislante o revestimiento) en el tanque si está en un lugar sin climatización: eso reduce pérdidas de calor.
  • Si tu zona tiene agua pesada (muy mineralizada), considerá instalar un filtro anti-sarro o suavizador de agua antes de la entrada fría.
  • Revisá el ánodo de magnesio (o ánodo de sacrificio) cada 6 a 12 meses y reemplazalo si está muy deteriorado — es una pieza que protege el interior del tanque de la corrosión.
  • En algunos casos, algunos equipos o manuales recomiendan descargar unos 20 litros por mes como medida preventiva para evitar acumulaciones pequeñas.
  • Si al purgar no se soluciona el problema, podría hacer falta una limpieza más profunda del serpentín, o incluso el reemplazo del equipo.

¿Qué hacer si el termotanque sigue sin calentar bien?

Si después de la purga tu termotanque sigue fallando:

  • Revisá el termostato: puede estar descalibrado o defectuoso.
  • Controlá conexiones eléctricas sueltas u oxidadas (con energía apagada).
  • Para los de gas: asegurate de que la válvula de paso esté completamente abierta y que la llama piloto esté funcionando correctamente.
  • Verificá si hay válvulas anti-retorno defectuosas o mezclas de agua fría/ caliente que generen pérdidas térmicas.
  • Si hay pérdida de agua en el tanque o olor a gas cercano, contactá un profesional urgente.

Conclusión

Purgar un termotanque es una tarea relativamente simple, pero que puede marcar una diferencia enorme en su eficiencia, consumo y vida útil. Con estos pasos vas a poder hacerlo de forma segura y efectiva. Lo ideal es que lo hagas al menos una vez al año, o con mayor frecuencia si vivís en una zona con agua muy dura o notas algún síntoma de mal funcionamiento.

Si no estás seguro, preferís que lo realice un gasista matriculado, o querés un repaso completo (incluyendo limpieza y revisión del ánodo), avisame: puedo ayudarte con un instructivo paso a paso para tu equipo específico o armarte una pauta de mantenimiento anual personalizada para tu zona en CABA / conurbano.